Pastelitos Chicotrópicos

No es el mejor capítulo de Glee ni de lejos (tampoco es malo, que no se asuste nadie), pero deja sentadas las bases de lo que va a ser la segunda temporada y presenta a algunos personajes nuevos. Es, por resumir un poco, algo parecido a una vuelta a los orígenes porque, después del tercer puesto en las Regionales, el Glee club tiene que volver a empezar casi de cero con bastantes similitudes a cuando lo hizo por primera vez.

Lógicamente no todo es igual. Ahora Will y Sue son amigos y van a tener un enemigo común: la nueva entrenadora de fútbol, Shannon Beiste, debido a la cual el presupuesto de las animadoras y el del coro se ha visto reducido. Will se une a todos los planes de Sue por quitar del medio a la nueva profesora y recuperar su presupuesto, al mismo tiempo que intentan conseguir nuevos miembros para sus equipos. Pero aunque Will al principio decide seguir a Sue en todo lo que la entrenadora Sylvester propone, acaba por no hacerlo cuando se da cuenta de las humillaciones a las que Beiste está siendo sometida, especialmente después de que Sue intente que Brittany acuse a Beiste de "toqueteos". Ante el giro en la actitud de Will, Sue se enfada y mucho... Y esto ya sí empieza a parecerse a lo que siempre fue Glee.

New Directions necesita nuevas incorporaciones, primero porque Matt ya no está con ellos y se han quedado en once miembros y, segundo, porque necesitan más voces que puedan hacer frente a Vocal Adrenaline.  Vuelven las semejanzas, porque buscar más miembros fue una de las primeras preocupaciones del coro. Ya que nadie se apunta en la lista que Schuester ha dispuesto para las audiciones, los chicos tienen que tratar de encontrar a compañeros que quieran unirse, y para eso hacen una actuación al aire libre, delante de todos y promocionando el lugar en el que se celebrarán las Nacionales, Nueva York, que consideran que será un buen reclamo para atraer gente. Rachel y Finn se fijan en dos posibles candidatos para entrar en el coro.

La primera es Sunshine Corazón, una chica filipina recién llegada al instituto a la que Rachel aborda en el baño con un dueto-duelo patrozinado por Lady Gaga. Surge un problema que sólo Rachel puede considerar como tal: Sunshine es una cantante genial que podría quitarle todo su protagonismo. A pesar de que Kurt y Mercedes le dicen a Rachel que necesitan a gente buena, Rachel no está conforme, y da a Sunshine una dirección equivocada del lugar en el que será la audición. Tina y Mike, que ahora son pareja, lo descubren y se lo cuentan a Will, que insta a Rachel a que avise a Sunshine correctamente del lugar en el que puede audicionar. Sunshine acude al auditorio y sorprende a todos los miembros del coro con su actuación. Está dentro.

En segundo lugar, es Sam Evans el chico en el que se fija Finn y al que además oye cantar en la ducha tras un entrenamiento del equipo de fútbol (igual que Will le escuchó a él). Finn propone a Sam que entre a formar parte del coro y le convoca junto con el resto de compañeros para que demuestre lo que es capaz de hacer. Todos los chicos dan el visto bueno a Sam, sólo queda que las chicas y Will lo vean.

Los dos fichajes se tuercen. Sunshine es captada por Vocal Adrenaline, mediante su director Dustin Goolsby (y con la ayuda de Sue), y Sam no se presenta a la audición. Cuando Finn, que ha sido previamente expulsado del equipo de fútbol, le pregunta por qué, Sam responde que ya tiene bastante con ser el chico nuevo en el que todos se fijan. Para más inri, ahora ocupa la posición que Finn tenía en el equipo.

Es la entrenadora Beiste la que expulsa a Finn cuando éste le propone que Artie forme parte del equipo, en un intento de ayudar a su amigo a recuperar a Tina. La entrenadora se lo toma como un insulto y expulsa a Finn, que entonces decide audicionar para el equipo de animadoras ante la perplejidad de Sue y de Becky., todo por mantener su popularidad, aunque ahora lo único que le queda es el coro y Rachel. Quien también se presenta a esta última audición es Quinn. Pese a la incial negativa de Sylvester, Quinn vuelve al equipo y lo hace como capitana, lo que le acarrea un enfrentamiento con Santana, que es relegada por Sue cuando descubre que se ha operado el pecho. Así que Quinn vuelve a ser la jefa, como al principio de todo...

Que Sam no se presente a la audición y que Sunshine se marche con Vocal Adrenaline son dos duros golpes para el coro, y del segundo todo el mundo culpa directamente a Rachel, a quien Finn le sugiere que no estaría mal pedirles disculpas a sus compañeros. Para terminar el episodio, Rachel acompaña su arrepentimiento previo a las disculpas con una canción...

Así que Sue vuelve a odiar a Will, Quinn vuelve a ser animadora, Rachel sigue siendo insoportable y New Directions sigue teniendo problemas de presupuesto y de falta de miembros, además de a un rival en frente (Vocal Adrenaline) aún más fuerte. Volvemos a empezar: from the top!