Pastelitos Chicotrópicos

Si el capítulo de la semana pasada era para Eugene Sledge, éste ha sido para John Basilone, al que, tras su heróico paso por Guadalcanal, sólo habíamos visto fugazmente cumpliendo con su misión de héroe: la venta de bonos de guerra.

Aunque el capítulo se centra en Basilone prácticamente por completo, Eugene tiene unos minutos al principio del episodio, en los que lo más trascendental que sucede es que uno de sus compañeros es destinado a otra unidad y que el propio Sledge recupera un libro de su capitán (muerto en el anterior capítulo). Nada más por esta parte y pasamos a centrarnos en Basilone.

Como ya sabíamos, John Basilone es un condecorado, reconocido y admirado héroe de guerra tras su actuación en la batalla de Guadalcanal. Pero como también se ha podido ver en anteriores episodios, cada vez se siente menos cómodo con este papel de héroe, por lo que decide pedir que se le traslade al Campamento Pendleton para poder enseñar a los novatos. Allí su fama también le precede. El Sargento Basilone empezará sólo con dos Marines a su cargo a los que después se les unirá el resto de la Compañía, cuya admiración por Basilone irá en aumento, a pesar de despertarles en medio de la noche para que salgan a correr y gracias similares.

Además de su función como instructor de los nuevos Marines, John tiene tiempo de conocer a Lena Riggi, la que será su esposa y que trabaja también en Pendleton. A pesar de las iniciales reticencias de ella, John conseguirá que Lena se enamore de él y ambos se casan justo antes de que John tenga que marcharse a Iwo Jima con su Compañía. Precisamente la decisión de contraer matrimonio surge al contarle John a Lena que va a marcharse. Ella asume perfectamente la relación que tienen, sabe que él puede morir en combate y acepta esa posibilidad. Muy bonito...

Basilone se va a Iwo Jima y, efectivamente, cae en combate tras otra espectacular y heróica acción, en la que conduce a un tanque a una posición más segura. Él no consigue huir del fuego japonés y muere.

Por su actuación en Iwo Jima fue condecorado póstumamente con la Navy Cross por los Marines, la segunda mayor medalla al valor. Antes ya había sido distinguido con la Medalla de Honor, la más alta condecoración que otorga el Gobierno de los Estados Unidos.

Un buen capítulo de homenaje para uno de los héroes norteamericanos de la Segunda Guerra Mundial.