Pastelitos Chicotrópicos

Hay quién dice que todo pasa por una razón. La razón de por qué Barney se tira al río Hudson está en "Of course" o tras el salto.

¡Mujeres! La pasión y la perdición de Barney y sobre dos va el capítulo. Todo comienza cuando Anita, una chica impresionante, liga en el bar con Barney... y pretende tenerle a raya hasta la cita diecisiete. Todo porque es la escritora de un libro en el que el "NO" es la clave para mantener el poder ante los hombres (viendo el capítulo pensé que habría que probarlo, pero con la finalización del mismo he pensado que mejor NO).

La cuestión es que Anita es en realidad una enviada de Robin a modo de venganza (se conocieron  por una entravista con But, uhm incluído en el programa de Robin). Mientras todos creían que la canadiense estaba perfectamente bien tras la ruptura con Barney, la realidad es bien distinta. Además, todos los chicos del grupo se dedican a celebrar las victorias amoroso-sexuales (bang bang bang) de Barney ante Robin que hace lo posible por evitar que la vean llorando tras las esquinas. Todo esto sale a la luz justo después de haber presentado a su compañero Don a Marshall y Lily, estando el primero de la pareja como loco por que Robin salga con su perfecto co-presentador, llegando incluso a fingir la voz de Robin por teléfono para concertar una cita con Don (quiero un amigo como Marshall).

Barney, sin embargo, ha comenzado su reto que, como no puede ser de otra forma, es conseguir acostarse con Anita. Para ello, Ted será su fiel ayudante preparando una super-date, que no mega-date, precedida de un número musical genial por parte de Ted y que constará de paseo en coche de caballos, cena, fuegos artificiales con Manhattan de fondo...

...pero entonces es avisado por Marshall y Lily de la situación en la que se encuentra Robin que, a la vez, al enterarse de la super-date, ha cancelado su cita con Don. Todos salvo Robin acuden a casa de Barney a explicarle lo que pasa y éste se va a ver a Robin, que, para aliviar su pena, está practicando tiro.

Barney renuncia a su super-date y a acostarse con Anita, pero ya que la super-date está montada, deja que Robin la utilice con Don. Por su parte, Anita renuncia a sus principios y va a por Barney al bar, pero éste se mantiene fiel a su promesa pese a todas las ofertas de Anita. Eso sí, la última es demasiado fuerte, así que Barney corre, corre, corre... y se lanza al rio. Barney, empapado, sabe que la super-date de Robin se está celebrando cuando ve los fuegos artificiales.

Lo sabíamos desde hace tiempo, pero ha sido igualmente bonito. Bang, bang, bang para Robin.