Pastelitos Chicotrópicos

Mucho me habían hablado -y había oído hablar- de Mad Men. Familiares, amigos y periodistas en programas de televisión o artículos de prensa ponían esta serie sobre publicidad por las nubes, y muchas veces no hay mejor campaña que el boca a boca. Además, los premios que ha ganado, y que seguro que va a seguir ganando, en las temporadas que lleva (la cuarta se estrenó el domingo en Estados Unidos) son otro buen aval para verla. Y sí, al final entre todos y entre todo me convencieron y lo hice: la vi. Como dice el título de la entrada, me he enamorado de la serie y de sus personajes. Del misterioso, seductor e inteligente protagonista, Don Draper, de su mujer, Betty, de sus hijos, de sus socios, de los empleados de su agencia y de las historias que ya han contado y las que quedan por contar.

Don Draper es un brillante publicista de Nueva York, uno de esos ejecutivos de Madison Avenue, conocidos como Mad Men. La acción nos traslada al comienzo de los 60, con la batalla Kennedy vs Nixon, la Guerra Fria y Marilyn como telón de fondo. Sterling Cooper, la agencia para la que trabaja el protagonista, es el lugar en el que se desarrolla la mayor parte de la acción. Pero no todo es publicidad. Pronto empezamos a ver que Don Draper esconde algo, que no siempre fue el triunfador que ha llegado a ser ni en los negocios ni en su vida personal. El secreto de Draper irá desvelándose poco a poco a lo largo de las tres primeras temporadas y estalla precisamente al final de la tercera, donde el mundo personal y profesional del protagonista se desmorona, dando paso en la cuarta temporada a una etapa nueva, distinta y arriesgada. 

Y aquí empieza el repaso al primer capítulo de la cuarta temporada, así que si todavía no eres un fiel seguidor de la serie y no quieres leer spoilers, abstente de seguir.

Don y sus socios (Sterling, Cooper y Pryce) comienzan su nueva andadura después de que su empresa fuera a ser de nuevo vendida a una agencia mayor a la que no querían pertenecer. Ha pasado un tiempo desde que tuvieran que instalarse en la habitación de un hotel para empezar a trabajar, y ya han conseguido hacerse con una oficina. Sin embargo, todavía pasan apuros económicos, y la figura de Don es fundamental para salir del paso. Pese a ello, una entrevista de éste no demasiado afortunada y desaciertos con clientes hacen que los cimientos de la nueva Sterling Cooper Draper & Pryce's se tambaleen. No sólo falla Don, también su favorita, Peggy, comete un error que, sin embargo, no tiene un coste importante para la imagen de la empresa, aunque sí toca el bolsillo de su jefe (la contratación de dos actrices para que se peleen por un producto acaba en una trifulca seria entre ambas). Don, finalmente, accede a dar otra entrevista a un periodista del Wall Street Journal, conocido de Cooper, con la esperanza de favorecer a la empresa y conseguir salir adelante.

En lo que se refiere a su vida personal, Don se ha divorciado de Betty, que, a su vez, ha contraido matrimonio con Henry. Ella, sus hijos y Henry siguen viviendo en su casa, algo a lo que Don pretende porner fin, ya que tenía un acuerdo con su ex mujer por el que ésta debía marcharse a vivir a otro lugar después de un tiempo. Betty se niega a pesar de que también su nuevo marido insiste en el tema, alegando que no quiere que haya más cambios para sus hijos. Betty tampoco consigue congeniar con su nueva familia política y su suegra la considera poco más o menos que una tonta que "aterroriza" a sus hijos, y así se lo transmite a Henry. Por otra parte, Don conoce a una amiga de Jane, la mujer de Roger, ya que el matrimonio está empeñado en buscarle pareja a Draper y éste se deja querer...

Buen comienzo de la cuarta temporada, mostrando cómo será la nueva etapa de la nueva agencia y también el cambio en la vida de Don Draper y del resto de personajes. Algunos de los que trabajaban en la antigua Sterling Cooper se han quedado en el camino con el cambio, pero las bases de la serie se mantienen (ahí están Joan, Pete y Peggy, por ejemplo). La relación de Don con Betty y la de ésta con Henry también pueden ser puntos interesantes en esta temporada, que ya han quedado apuntados con el primer capítulo. Ya veremos cómo se desarrollan (¡y qué ganas de hacerlo!).